Drâa-Tafilalet, Casa de las Danzas Poéticas

Ahwach, la Expresión de la Pasión

El Ahwach es una antigua danza ritual que representa un simbolismo de la vida social a través de estructuras coreográficas colectivas. Presente en todas las grandes ceremonias nocturnas, Ahwach involucra tanto a mujeres como a hombres.

Durante horas, los protagonistas danzan alrededor de una hoguera, creando un universo idílico donde la magia de la palabra se apodera. El amor, en todas sus formas, a menudo se invoca utilizando un estilo pictórico con una fuerte dependencia de las analogías.

Bajo el control del jefe de orquesta, el ritmo es apoyado por varios instrumentos de percusión, entre ellos el extraordinario naqus, mientras que la melodía encuentra eco en las cuerdas de los ribabs.

Ahidous, el Himno de las Cimas

Tradición centenaria, el Ahidous es una danza compartida por las tribus del Alto y Medio Atlas, y algunas de las llanuras circundantes. Es un espectáculo auditivo y visual trascendente que despliega música, ritmo, coreografía y poesía. Más allá del aspecto artístico mágico, Ahidous es portador de una panoplia de señas de identidad culturales, enriquecidas por siglos de existencia.

Se puede distinguir a Ahidous Askwat, destacado en grandes ocasiones, y Ahidous Amezian, más interpretado durante las festividades familiares.

Durante los Ahidous, hombres y mujeres, hombro con hombro, forman círculos ondulantes que cambian de forma a medida que actúan. En solitario o en coro, los actores recitan versos poéticos, que se relacionan con la canción de Izlan, para tratar temas que van desde el amor a la política. En cuanto al ritmo musical se logra mediante panderetas y palmas de las manos.

Tizouite, la Danza con Aroma a Rosa

Practicada en el valle de M’gouna, la Tizouite es una danza similar a la de Ahidous. La coreografía simboliza a la mujer como abeja, Tizouit, y al hombre como apicultor, y cuenta cómo este último no puede vivir sin las abejas, y que a su vez esas no pueden vivir sin las flores.  Se trata de un auténtico homenaje a la rosa que es el orgullo del valle.

Tizouite es muy popular durante las celebraciones, y se le rinde homenaje durante la Fiesta de la Rosa.

Sobre los sonidos de los tambores y de las flautas, la danza sigue un ritmo vivo y un perfecto dominio de los pasos, que hacen acercar, alejar y dividir dos filas compuestas cada una de 8 bailarines. Los dos conjuntos realizan luego rotaciones muy armoniosas antes de reunirse en torno al Jefe y a Yassoub, la reina de las abejas.

Bailando a las Puertas del Sahara

La Rokba es una danza colectiva muy extendida en el Oasis de Zagora. Compuesta por movimientos coreográficos y poemas líricos, es interpretada por hombres y mujeres, especialmente durante las bodas y las celebraciones comunitarias.

El ritual comienza con la recitación de un conjunto de versos, llamado Kalma, por los hombres; a los cuales responden las mujeres con una voz aguda. La continuación de la poesía es acompañada por un ritmo musical, utilizando las manos, los pies y los tambores.

Los intérpretes se alinean en dos filas paralelas, con el maestro en el centro de una de ellas. Así dirige la coreografía y la música, utilizando signos sutiles o códigos para señalar los cambios de posición y de ritmo.

Bahbi, el Ahidous de los Iqbliyans

Adulada en el valle del Ziz, Ahidous Bahbi es una danza emblemática que reúne a mujeres y hombres en un juego de roles muy poético. Al ponerse en fila soldada, los hombres golpean a los panderos y dirigen el juego con su voz grave, mientras que las mujeres se afanan en batir las manos y con una voz aguda responden.

El poeta principal, conocido como Anchad, recita el primer verso y sus repetidores lo retoman, y así hasta el final del texto poético. Todo ello acompañado de un ritmo vivo y movimientos elegantes.