Nada puede sustituir al Zoco, también conocido como Al Mouggar, ya que constituye un centro de gravedad en muchos aspectos. Mucho más que puestos comerciales de elección, los zocos tienen también una vocación social ancestral. Se trata de lugares donde la gente se reúne y refuerza sus lazos tribales y familiares, donde es bueno disfrutar de una taza de té mientras se discute animadamente. Vivos y coloridas, ofrecen lo útil y lo insólito, junto a tesoros y objetos antiguos.
Descubra un espléndido patrimonio cultural y económico y disfrute de una experiencia de compra única, que combina exotismo y autenticidad.
Al Aire Libre
Los zocos semanales suelen estar formados por lugares improvisados al aire libre, que se agrupan en Rahba (plazas) según la naturaleza del producto expuesto: frutas y verduras, carne, textiles, especias, artesanía, etc. Al deambular por las callejuelas, pasará por un universo lleno de muchos colores y sonidos, donde no faltan las escenas pintorescas.
La ruta de las 1000 kasbahs está llena de auténticos zocos, como es el caso del sublime de Skoura, de Khmiss Telouet, de Tinejdad, de Rissani, de Nkob, de Agdz o de Alnif. También tendrá la oportunidad de explorar el zoco de Kelaat M’Gouna que se celebra todos los miércoles, donde podrá adquirir los productos únicos del Valle de las Rosas. Mientras explora las emblemáticas gargantas de Todgha, también puede continuar hasta Msemrir, donde un zoco de aspecto fantástico cobra vida todos los sábados. Las mesetas del Alto Atlas albergan zocos encaramados a más de 2000 m, como el gran Zoco de Rich o incluso Khmiss Boumia y su mercado de cerámica. Sin olvidar los fabulosos zocos que se encuentran a las puertas del Gran Sahara, como Khmiss Merzouga, Had Zagora y la feria Mhamid El Ghizlane.
Estas paradas le permitirán abastecerse durante los viajes por carretera, al tiempo que disfruta de una experiencia humana única.
Compras en la Ciudad
Las ciudades también tienen sus zocos, que adoptan la forma de mercados centrales, también llamados Kissariats. A diferencia de los zocos rurales, los kissariats están cubiertos y se componen de tiendas y puestos. No por ello son menos ricos, ya que todos contienen un número infinito de productos y servicios.
En Errachidia, Souk Lhad es una encrucijada indispensable para el comercio de dátiles en el palmeral de Ziz. Aquí se puede encontrar todo tipo de productos, incluida una gran selección de plantas aromáticas y medicinales que se pueden encontrar en las herboristerías tradicionales y que son muy utilizadas en la condimentación de la cocina local. Un poco más al sur, el zoco de Erfoud contiene tiendas que venden fósiles y minerales de gran calidad.
Si le interesa la artesanía, no se pierda el Kissariat de Ouarzazate, repleto de maravillas de todas partes, como la cerámica de Tamegroute, las alfombras de Ouzguita, las dagas de Azlag e incluso los trajes tradicionales que representan a toda la región. Los bazares de Zagora, Merzouga y M’hamid El Ghizlane ofrecen una oportunidad especial para adquirir todos los accesorios Touareg. Visitando a Midelt, es recomendable dar un salto a la Cooperativa de Andaz Nouska, especializada en bordados y tapices del Alto Atlas Oriental.
Marruecos cuenta con más de 900 zocos o mercados rurales semanales activos, que suponen el desplazamiento de entre 4 y 5 millones de personas a la semana, es decir, aproximadamente la mitad de la población rural. Por ello, el zoco recibe el acertado nombre en amazigh de Al Mouggar, que significa foro o lugar de encuentro.
Derechos de autor 2024 Este sitio está gestionado por el Consejo Regional de Turismo Draa Tafilalet
